sábado, 6 de mayo de 2017



Estas son palabras de nuestro hijo Francisco para Lao 


La manera acostumbrada
No le funciona
Se vuelve un tipo raro, trabaja muchas horas
o vive demasiado rápido,
no llega a su destino, igual que todos,

se siente personaje
de un libro que imagina
contando sus aventuras en los siete mares,
se pone misterioso, pero intimida quieto,
parece algo terrible
y se está divirtiendo
se vuelve impresentible
como un cañon de fuego 
que arenga a los caballos
corriendo en un desierto.
Estoy acostumbrado
A verlo pensativo,
Pero sus pensamientos
van mucho mas adentro.
El dia que se vaya,
Dirá: no es para tanto,
No llevará valija
Ni mucho menos ropa.
Y llegará al destino, 
de todas sus pasiones
Y sembrara las nubes 
con sus recuerdos.
Y criará estrellas,
Pollitos de universo.
Y lloverá su nombre, lloverá, también 
Como las primaveras cercanas de otros días-
El mundo era distinto,
Entonces el nacía
Y al ver en los murmullos
rastros de hipocresía,
primero fue dolido
después se fue tranquilo
nunca se fue del todo,
Guardián
de los sentidos
Sabe lo que le importa
El resto lo imagina
A veces no lo entiendo
Como ese en el espejo,
Que mira lo que hago,
Mientras se pone viejo.
Me siento tan distinto, Tal vez en lo distinto
Y en todos los sentidos
Sabemos que en el fondo,
La Tierra siempre gira, la tierra siempre gira…
Como esta melodía, como este mediodía.
Nos vemos en el fondo,
Atrás de la pileta
Salud, viejo y compadre,
Y todos mis respetos