escribí una canción
que sonaba
al son de los tambores
bailarines con alegría
acompañaban
a cuyo paso entusiasmado
flores arrojaban
caminando apresurados
era alegre y positiva
y parecía
que la vida estaba viva
llenaban una calle tan desierta
haciendo
que la muerte estuviese muerta
escribí una canción
el otro día
que sonaba
al son de los tambores
el sol estaba hermoso
el viento soplaba
muy glorioso
y como hecho extraordinario
los niños y los viejos
sonreían