SEGUIR SIENDO

Era muy chico y me gustaba jugar con las hormigas que iban por su caminito. Algunas mañanas, sentado en el suelo, cosa increible...había un pajarito -un hornero- que a los saltitos se me acercaba.También me tiraba en el pasto fresco y veía cómo volaban las nubes, mientras un vientito suave me soplaba. A la noche, como la luz eléctrica era limitada, el cielo era muy oscuro y profundo, y, las estrellas muy brillantes...me interesaba aprender sus nombres, soy muy curioso.
He jugado a correr mariposas y "bichitos de luz", así como remontar barriletes -que en ritual ceremonia había armado-; trepar árboles, y muchísimas cosas interminables de contarte.
Con el tiempo fuí como despertando de un sueño y descubriendo un mundo donde las personas corrían sin saber hacia dónde. Se gritaban entre ellos sin saber porqué. Trataba de cerrar los ojos y los oidos, pero no podía.......................
"Sos muy idealista" me dijeron un día...
Comencé a sentir.....que en el mundo no cabía...
Me encerré en mí mismo, me llamé a la reflexión, el sentimiento de soledad y las tormentas que afronté, parecieron interminables. Reflexioné y descubrí que IDEALISMO ES SINONIMO DE REALIDAD.
Icé mis propias velas y navegué con fortaleza en medio de ellas.Tomé la vida como un desafío...fue larga la historia, costosa y cruel hasta llegar al abismo... pero continué hacia adelante, a pesar de que muchas veces todo parecía caerse en pedazos...
Hoy sigo "timoneando" tormentas...pero tranquilo y seguro...¿Sabés una cosa? No cambié en nada...sigo siendo ¡el mismo idealista! -como me dijeron un día- solamente que , curtido, luchador empedernido y completamente convencido.
No dejé de mirar las hormiguitas, las estrellas, convivir con los pajaritos y hasta puedo subir un árbol. Sigo siendo "mas el mismo que antes"...